Por desgracia, son miles las personas que se encuentran en todo el mundo enganchadas al alcohol sin saber cómo poner solución a sus problemas. La OMS (Organización Mundial de la Salud) califica a este comportamiento como un fenómeno en el que esta sustancia se apodera de la vida de la persona, siendo casi imposible controlar su consumo.
Una clínica de desintoxicación del alcohol es la mejor solución para dejar a un lado estos problemas y poder volver a la vida normal totalmente rehabilitado, pudiendo recuperar tu vida y el apoyo de todos tus seres queridos.
Es necesario que el tratamiento por estar preso del alcohol lo realicen profesionales, ya que saben cómo deben actuar en cada situación dependiendo del grado de adicción de los pacientes, por lo que el tratamiento puede variar.
¿En qué consiste el tratamiento contra el alcohol?
El tratamiento para cubrir a los pacientes con adicción al alcohol, consta de las siguientes fases:
1) Confrontación
Es normal que cuando se habla con la persona afectada sobre acudir a una clínica especializada, obtengamos el no por respuesta. Ten por seguro que, aunque él sepa que tiene un problema y en realidad sepa que tiene que acudir a este centro, no quiere dejar a un lado a la gente que aún tiene a su alrededor.
Lo más normal es que le intente quitar importancia a la adicción que tiene y a la frecuencia con la que consume alcohol, justificará las veces que lo ha hecho y dirá que será más responsable de aquí al futuro.
En esta primera fase el apoyo de la familia es muy importante. A la hora de ingresar en una clínica especializada, se pasa muy mal, pues tiene que dejar a un lado a sus seres queridos durante un tiempo para empezar con el proceso de desintoxicación.
2) Desintoxicación
Durante esta fase, se intenta que el cuerpo elimine las toxinas tiene acumuladas por el consumo del alcohol. Es en este momento cuando los síntomas de abstinencia salen a flote, viéndose reflejados a modo de ansiedad, temblores y náuseas a las 48 horas de la última vez que ha consumido.
En este momento el personal debe de estar pendiente de él, ya que puede sufrir insomnio, problemas respiratorios e incluso convulsiones, pudiendo dar lugar al “Delirium tremens” (la forma más grave de la abstinencia).
2.1) Tratamiento farmacológico
El medicamento que se da a los pacientes son las benzodiacepinas, aunque también se pueden utilizar tiapride o clometiazol. El objetivo de estas sustancias es que se pueda dejar a un lado el síndrome de abstinencia lo antes posible, así como ayudarle a superarlo.
No hace mucho tiempo se ha indicado que otro tipo de fármacos como la oxcarbamacepina o la gabapentina también pueden actuar como agente único en este tratamiento.
3) Deshabituación
Una vez se está produciendo la desintoxicación, llega el momento de volver a enseñar al paciente un estilo de vida saludable y cuidado, el que deberá de seguir a partir de ahora para involucrarse de nuevo en la sociedad y reducir las posibilidades de que se produzca una recaída.
Esta fase es la más larga de todo el tratamiento y puede llevarse a cabo mediante diferentes propuestas, como la farmacológica o la psicoterapéutica. Sin importar cual se elija, el objetivo a conseguir es el mismo.
Estas terapias están basadas en la motivación para que el paciente controle la abstinencia y le dan a conocer distintas herramientas para cumplir este objetivo. Algunas de las herramientas están basadas en la resolución de conflictos, técnicas sociales o el manejo de la ansiedad y la depresión.
Por otro lado, el objetivo de las propuestas farmacológicas es el de utilizar fármacos que eliminen la acumulación de acetaldehido, provocado por el consumo de alcohol, evitando así que el cuerpo necesite de esta sustancia. Gracias a este refuerzo y a que el paciente sabe que no es bueno combinar alcohol con fármacos, se consigue un refuerzo que le ayuda a seguir adelante.