Los peligros de la cocaína

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La cocaína, como sabemos, es una de las drogas más populares en estos últimos tiempos, sobre todo, entre los jóvenes, ya que muchos han llegado a consumirla aunque sea una vez. A pesar de que la adicción a cualquier droga entraña sus propios peligros, lo cierto es que el consumo de la cocaína puede traer terribles consecuencias propias para la salud.


¿Cuáles son los efectos que produce la cocaína?

La cocaína principalmente afecta al sistema nervioso, por lo que se puede llegar a experimentar euforia y vivacidad por su consumo. El consumo de cocaína puede activar el sistema nervioso a un nivel en el que se puede llegar a experimentar reflejos más potentes de los que naturalmente se poseen. Como efectos negativos los más habituales suelen ser mareos, náuseas o vómitos. En los peores casos, el consumo de cocaína puede traer delirios, momentos de tristeza y depresión repentina, paranoia, e incluso se han registrado casos de suicidio.

El consumo de esta sustancia afecta al ritmo cardíaco así como a la presión arterial, pudiendo llegar a provocar ataques repentinos al corazón o un ritmo anormal de latidos. Estas consecuencias se aplican tanto a la gente de perfil más joven como de mediana y avanzada edad.


Adicción al consumo de cocaína

La cocaína es una droga que crea una fuerte adicción, incluso desde el primer consumo. Este aspecto hace que la adicción a la cocaína sea un problema que requiera de una gran concienciación social.

Así las cosas, no se trata de una droga que solo encuentre cabida para distanciarnos de un problema o situación problemática conflictiva, ni para el uso únicamente recreativo. El consumo de cocaína se ha instalado en nuestra sociedad como estimulador en ámbitos laborales, asociándose a perfiles que necesitan estar activos a máxima intensidad durante muchas horas. El consumo es tan frecuente que incluso podemos verlo en ámbitos universitarios frente a períodos de exámenes.


Dejar la cocaína con apoyo

Como toda adicción de perfil severo, puede llevar a la perdida del control por parte de los consumidores de la misma. El período de abstinencia presenta entre otros síntomas debilidad muscular, irritabilidad, lentitud y depresión. A estos, podemos sumar además problemas que pueden darse en paralelo como; absentismo laboral, problemas para relacionarse con otras personas, períodos de abatimiento grave, inestabilidad económica, disminución de las capacidades de ejecución, considerables pérdidas económicas, etc.

Aunque el consumo de cocaína está muy generalizado, la desintoxicación requiere un tratamiento profesional realizado por un centro de desintoxicación especializado. Es importante que el desafío de dejar de consumir sea tutelado por un equipo profesional, maximizando las oportunidades de éxito y evitando el deterioro social, psicológico y de salud del consumidor.

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